miércoles, 26 de mayo de 2010

La amistad del alma

Cuando nos vemos con Marie, que no pasa muy frecuentemente, a veces anotamos grandes frases.

Totalitarias, dictatoriales y ridiculamente ciertas.

Una que no anotamos fue una vez, volviendo del peor outlet del universo, corrimos como prostitutas tímidas a un colectivo parado en semáforo, sintiéndonos la Coca Sarli y Aníbal Pachano, y el colectivero NI nos miró NI nos abrió la puerta del bondi.

Marie indignada le gritó: "ORTIIIIIIIIIIIIIIIVA, PUUUUUUUUUUUUUUUUUUUTO"


Así es el amor.

5 comentarios:

  1. me encanta pelearme con el colectivero

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  2. EL OTRO DIA SUBO A UN COLECTIVO VOMITADO, A LAS 7 DE LA MAÑANA DE UN PUTO DIA DE SEMANA PONGO LAS MONEDAS DE MIERDA Y NO SALE EL BOLETO.
    LE DIGO BIEN REPITO, BIEN, AL BONDIERO: NO SALE EL BOLETO, EH. (AVISANDO)
    Y ME DICE: YA AVISE QUE NO SALE EL BOLETO, FASTIDIADO Y GRITANDO.

    A LO QUE SABIAMENTE CONTESTE:

    ME ACABO DE SUBIR, PELOTUDO, YO QUE SE QUE DIJISTE.

    AHI TERMINO LA CONVERSACION.

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  3. Qué bagasho me siento, cuando el colectivero no me abre la puerta ...

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  4. el bagallo es él que no tre quede duda

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